El papa Francisco y el patriarca sirio llaman a la oración tras los devastadores terremotos en Turquía y Siria

El Papa Francisco y los líderes locales de la Iglesia reaccionaron el 6 de febrero con consternación y llamaron a la oración tras el devastador terremoto en Turquía y Siria.

Según Reuters, la serie de terremotos, de hasta 7,8 de magnitud, mató a unas 1.700 personas e hirió a miles más, con muchas personas aún atrapadas bajo los escombros el lunes. Se esperaba que las cifras crecieran en las próximas horas.

El Servicio Geológico de EE. UU. reportado el terremoto de la noche a la mañana golpeó a una profundidad de 11 millas.

Un Papa Francisco “profundamente entristecido” envió “sentidas condolencias a quienes lloran su pérdida” en telegramas dirigidos a los nuncios apostólicos de Turquía y Siria.

Los telegramas, firmados por el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, decían que el Papa Francisco oró “para que el personal de emergencia sea sostenido en el cuidado de los heridos y en los esfuerzos de socorro en curso por los dones divinos de la fortaleza y la perseverancia”.

El Papa también afirmó “su solidaridad espiritual” con el “sufrido pueblo sirio”.

En Siria, que ha sido devastada por más de una década de guerra civil, innumerables edificios se derrumbaron el 6 de febrero, incluidas varias iglesias católicas, informó ACI MENA, la agencia asociada en árabe de CNA.

El patriarca católico sirio Mar Ignatius Ephrem Josef III Younan llamó a los fieles locales a orar.

El patriarca se encuentra actualmente en una visita oficial a las diócesis sirias en Irak. Es el patriarca católico siríaco de Antioquía y dirige la Iglesia católica siríaca. 

El patriarca Younan pidió al Señor que tenga misericordia de las almas de las víctimas, cure a los heridos, apoye a los afectados y apoye a todos los que brindan ayuda y asistencia a los heridos y afectados, informó ACI MENA.

Además, el líder de la Iglesia expresó su solidaridad y oraciones por todos los afectados por los terremotos.

Entre las muchas víctimas, el cuerpo del padre Imad Daher, sacerdote de la parroquia católica greco-melquita de Nuestra Señora, fue encontrado bajo los escombros, después de muchas horas de búsqueda del sacerdote.

Según la organización humanitaria católica Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), Daher murió cuando se derrumbó la residencia del exarzobispo de Alepo, Jean-Clément Jeanbart. Jeanbart escapó por poco y actualmente está siendo tratado por sus heridas en un hospital, aunque se dice que está estable, dijo ACN en un comunicado el lunes. Otro hombre cristiano que estaba en el edificio en ese momento también murió, dijo la organización.

ACN informó que muchas ciudades y pueblos con una importante población cristiana, como Alepo, Homs, Lattakia y Hama, sufrieron daños importantes.

Entre los edificios dañados se encuentran la Catedral Ortodoxa Siria de San Jorge en Alepo y la Iglesia Franciscana en Lattakia, informó ACN. El Hope Center, apoyado por ACN, también en Alepo, sufrió daños menores, dijo la organización.

La Iglesia en Siria está conmocionada por la catástrofe. Incluso en lugares tan lejanos como Beirut, la gente salió a las calles, preocupada de que otra explosión estuviera a punto de desestabilizar su país”, dijo Regina Lynch, directora de proyectos de ACN International, en un comunicado el lunes.

Según un comunicado de la Custodia de Tierra Santa, un sacerdote franciscano en Alepo, el padre Bahjat Karakach, informó que “al menos 40 edificios han sido destruidos y muchas personas siguen atrapadas bajo los escombros”.

Los frailes abrieron las puertas de su convento a los habitantes que buscaban ayuda, informó el sacerdote. “Hemos llevado a la gente a la iglesia aquí, desde esta mañana, luego celebramos la Misa y abrimos el salón para acomodar a la gente y darles algo de comer; nuestra cocina, que suele distribuir 1.200 comidas al día a los pobres, hará todo lo posible hoy para ayudar a todos los que no tienen hogar y no pueden comer”.