El obispo Janak se despide de la diócesis de Victoria

El obispo Janak se despide de la diócesis de Victoria

El obispo Gary Janak fue instalado como obispo auxiliar en la Arquidiócesis de San Antonio el 20 de abril. 

A los Fieles de la Diócesis de Victoria:

Mientras me preparo para partir de la Diócesis de Victoria y comenzar mi ministerio episcopal en la Arquidiócesis de San Antonio, lo hago con sentimientos encontrados. Estoy agradecido por la oportunidad de ser obediente a lo que la Iglesia me ha pedido y honrado por la confianza que el Papa Francisco ha depositado en mí, pero estoy abrumado por tener que irme de mi casa. La Diócesis de Victoria es la única diócesis que he conocido.

Siendo uno de los primeros de los cinco seminaristas colegiados de la recién formada Diócesis de Victoria en mayo de 1982, he tenido la oportunidad única de presenciar el desarrollo de la fe y el desarrollo de la diócesis, que celebrará su 40 aniversario el próximo año.

El obispo Charles Grahmann me ordenó en Palacios el 14 de mayo de 1988. Después de dos años de ministrar con él, fue trasladado a la Diócesis de Dallas.

En 1990, el obispo Fellhauer se convirtió en nuestro obispo y ministré con él durante más de 25 años. Qué alegría ha sido para mí hacerlo. El obispo Fellhauer se ha convertido en un verdadero padre espiritual para mí. Desde que fue nombrado obispo auxiliar de la Arquidiócesis de San Antonio, me ha ayudado mucho en este período de transición.

En junio de 2015, el obispo Cahill fue ordenado como nuestro obispo y, desde entonces, he trabajado muy de cerca con él. Lo he observado y aprendido de él. Oro para poder incorporar a mi propio episcopado lo que él ha abrazado en su ministerio: un amor por las personas a las que está llamado a servir y un verdadero colaborador con sus sacerdotes.

Ofrezco mi gratitud a los fieles de la Diócesis de Victoria. Gracias por ejemplificarme el amor de Cristo y por mostrarme cómo confiar en Dios y amar más profundamente a nuestro Señor y Salvador. He tenido el privilegio de servir en parroquias en Victoria, Yoakum y El Campo. Como director de vocaciones en la década de 1990, viajé y prediqué en todas las parroquias de la diócesis. Como canciller y vicario general, he tenido la bendición de servir a la diócesis y, en particular, de satisfacer las necesidades de nuestros sacerdotes y diáconos. Que gozo ha sido para mi servirles, en el Nombre de Cristo.

Mientras me preparo para mi ordenación el 20 de abril, oren por mí. He escogido, como mi lema episcopal, “Dale a tu siervo un corazón que escuche”. Ore para que siempre escuche a Dios ya las personas a las que estoy llamado a servir. Una vez más, gracias por su amor y apoyo. Los extrañaré y estaré siempre agradecido con ustedes y la Diócesis de Victoria.