Caridades católicas que ayudan a los refugiados que huyen de la crisis en el Medio Oriente

Caridades Católicas ayudando a los refugiados que huyen de la crisis en el Medio Oriente

“Nuestro mundo se enfrenta a una crisis de refugiados de una magnitud que no hemos visto desde la Segunda Guerra Mundial.” – Papa Francisco

Recientemente, he recibido una serie de preguntas sobre nuestro papel en la solución de la crisis en el Medio Oriente. Mi respuesta es simple. Trataremos a los refugiados sirios como tratamos a cualquiera que busque refugio en nuestra comunidad. Caridades Católicas recibirá refugiados en el aeropuerto. Ayudaremos a las familias a asegurar una vivienda. Facilitaremos las citas médicas y de servicios sociales. Apoyaremos a los refugiados con orientación cultural para adultos y niños en edad escolar, servicios de empleo y servicios de asesoramiento. Trataremos a nuestros huéspedes más nuevos con amor y amabilidad, brindándoles refugio de la tormenta.

Acabo de regresar de Filadelfia para el Encuentro Mundial de las Familias con el Papa Francisco. Su mensaje con respecto a los inmigrantes no podría haber sido más claro. Habló a menudo del hecho de que es hijo de inmigrantes y sugirió, en última instancia, que todos somos inmigrantes en este continente. Reconoce el enconado clima social y político de nuestro mundo y lamenta la inquietante violencia, el conflicto y el odio cometidos contra las personas, a menudo en nombre de la religión y de Dios. Él sugiere que nuestra respuesta sea de esperanza, paz, justicia y sanación. Pide a los líderes mundiales que usen su inteligencia e influencia, combinadas con coraje y fuerza para abordar las crisis geopolíticas a través de un espíritu de cooperación. Aunque reconoce los grandes obstáculos que tiene por delante cualquier nación que se enfrente a una afluencia de refugiados, nos implora que no nos asustemos por las grandes cantidades. En cambio, nos pide que veamos el rostro de Cristo en cada uno de ellos, que entendamos su singularidad, honremos sus historias y respondamos con dignidad y respeto a sus necesidades extremas. Es aquí que nos recuerda La regla de oro, un concepto de naturaleza tan simple, sin embargo, un concepto tan difícil de confiar cuando a menudo es tan fácil dar la espalda a lo que nos preocupa.

“Nosotros, la gente de este continente, no tenemos miedo de los extranjeros porque la mayoría de nosotros alguna vez fuimos extranjeros”. - Papa Francisco

Solo confrontando la realidad de la persecución podemos esperar construir la paz y permitir que todos y cada uno de los refugiados regresen a casa y reconstruyan sus vidas. Hasta entonces, Caridades Católicas hará su parte para servir a los refugiados sirios afectados por una agresión injusta. Caridades Católicas está lista, dispuesta y capaz de ayudar hasta 500 refugiados sirios en los próximos meses. Hemos trabajado diligentemente para llegar a este número porque creemos que contamos con los recursos adecuados para 500 personas. Comprometernos con este número nos permite brindar servicios de calidad mientras tratamos su cambio drástico de vida con dignidad y compasión.

Humildemente les pido que mantengan en sus oraciones a todos los involucrados en esta crisis, desde las personas que buscan refugio hasta los políticos que tienen que tomar decisiones muy difíciles. También les pido que mantengan a nuestro personal y nuestra misión en consideración en oración. Nuestro objetivo es siempre ayudar a los más necesitados a través del servicio desinteresado bajo el signo del amor. Sin embargo, no podemos llevar a cabo nuestra misión solos. Siempre debemos confiar en la amabilidad de nuestros donantes, la confianza de nuestros donantes, la generosidad de nuestros voluntarios y el apoyo de nuestra comunidad. Mi pedido es que mantengas esta intención muy sagrada.

J. Antonio Fernandez es presidente/CEO de Caridades Católicas de la Arquidiócesis de San Antonio