​Statement of Archbishop Gustavo regarding shooting in Buffalo

Statement of Archbishop Gustavo regarding shooting in Buffalo

Regarding the senseless and tragic murder of 10 individuals and the wounding of three others in a Buffalo supermarket the afternoon of May 14, we profoundly regret the loss of life and pray for all concerned. We remain steadfastly opposed to all forms of racism.

In their most recent pastoral letter against racism, “Open Wide Our Hearts,” the United States Conference of Catholic Bishops write: “We unequivocally state that racism is a life issue. Accordingly, we will not cease to speak forcefully against and work toward ending racism. Racism directly places brother and sister against each other, violating the dignity inherent in each person.”

Our faith declares that all are loved by our Creator God and therefore simultaneously we are sisters and brothers to be treasured from conception onward. Conversion of heart to this value is essential.

Weapons in the hands of those who hate is a formula for disaster.

Pray for the family members of these brothers and sisters needlessly gunned down while shopping for groceries on the weekend. May God comfort and console them with an outpouring of love as they try to comprehend the incomprehensible.

Declaración del Arzobispo Gustavo García Siller, MSpS, sobre asesinatos en supermercado en Buffalo

En relación con el asesinato trágico y sin sentido de 10 personas, y las heridas sufridas por otras otras tres en un supermercado de Buffalo, lamentamos profundamente la pérdida de vidas y rezamos por todos los involucrados. Seguimos oponiéndonos firmemente a toda forma de racismo.

En su carta pastoral más reciente contra el racismo, “Abramos nuestros corazones”, la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos escribe: “Declaramos inequívocamente que el racismo es un problema relacionado con el tema de la vida. En consecuencia, no dejaremos de hablar enérgicamente en contra del racismo ni de trabajar para acabar con él. El racismo enfrenta directamente a hermanos y hermanas, violando la dignidad inherente a cada persona”.

Nuestra fe confiesa que todos somos amados por nuestro Dios Creador y por lo tanto simultáneamente somos hermanos y hermanas que debemos ser atesorados desde la concepción en adelante. Es fundamental la conversión del corazón en relación con este valor.

Las armas en manos de los que odian son fórmula para el desastre.

Recen por los familiares de estos hermanos y hermanas asesinados a tiros innecesariamente mientras compraban comestibles el fin de semana. Que Dios los conforte y consuele con una efusión de amor mientras tratan de comprender lo incomprensible.